Higiene ocular Los párpados y las pestañas protegen los ojos de la desecación, de posibles lesiones y de cuerpos extraños. Debido al contacto diario con sustancias contaminantes, productos cosméticos o el aire seco, los párpados precisan un cuidado y atención regulares. Las enfermedades de los párpados provocan la segregación de secreciones y la formación de costras, que pueden resultar perjudiciales para los párpados y la córnea.
Párpados Mediante la oclusión del ojo los párpados nos protegen de posibles lesiones y de la alta incidencia de luz. El movimiento regular y casi siempre inconsciente de los párpados (de 8 a 12 veces por minuto) humedece la superficie ocular extendiendo el líquido lagrimal. Los bordes de los párpados están cubiertos con una secresión que evita el derrame del líquido lagrimal. El párpado superior es mayor y más agil que el inferior. En el extremo exterior del borde del párpado crecen las pestañas (cilios), que evitan el contacto con cuerpos extraños. En el extremo interior de su borde se encuentran pequeñas salidas en forma de puntos, pertenecientes a las glándulas secretoras activas, que se encuentran en el párpado y participan en la creación del líquido lagrimal: las glándulas de Meibonio producen una segregación aceitosa y las glándulas lagrimales accesorias una segregación acuosa. Los párpados, las pestañas y el líquido lagrimal protegen al ojo de la desecación y de los cuerpos extraños. El motivo de que los párpados sean especialmente sensibles radica en el hecho de que su piel es extremadamente fina. Tiene poca grasa subcutánea y poco tejido adiposo. Las glándulas adiposas y sebáceas son muy escasas en comparación con el resto de la piel de la cara. De ahí que los párpados tiendan a la sequedad y la formación de arrugas. Además el tejido subcutáneo de los ojos almacenan agua con suma facilidad, por este motivo los párpados se hinchan. La piel de los párpados puede volverse áspera, puede hincharse o bien secarse, como si de un barómetro se tratara. Puede delatar cansancio, estados emocionales y enfermedades. La piel en la zona de los párpados precisa de un cuidado especial, aunque a menudo se olvida como parte de la higiene corporal. La sensación de la relajación de la piel es un claro síntoma de pérdida de la película hidrolipídica. Los bebés En los primeros años de la vida las gládulas lagrimales producen más líquido que en los jóvenes y adultos. Esto es importante ya que las defensas inmunológicas del recién nacido todavía no están muy desarrolladas. El líquido lagrimal contiene la enzima lisozima que evita los agentes patógenos. Los niños producen mucina en abundancia, esta fina sustancia mucosa cubre la córnea y la conjuntiva y es importante para una buena humectación. La consecuencia es que al solidificarse provoca la formación de costras y sedimentos en las pestañas y reborde de los párpados. A veces los pequeños orificios lagrimales no permiten
el normal tránsito lagrimal obstruyéndose los conductos lagrimales
provocando el rebosamiento de la lágrima por el borde del párpado inferior
(epifora). Casos en los que resulta adecuado realizar la higiene diaria del reborde palpebral y las pestañas
Toallitas higiénicas (compresas) Indicaciones recomendadas:
El uso de estas toallitas es simple y cómodo por presentarse en paquetes individuales y estar ya impregnadas. El nombre comercial de estas toallitas higiénicas es Supranettes®. Limpieza con geles Los productos de limpieza para los párpados y pestañas también se distribuyen en forma de gel. La humectación de las compresas se realiza inmediatamente antes de su uso vertiendo el gel sobre una compresa o un pañuelo de papel. No obstante este método implica que se disponga en todo momento de compresas o pañuelos de papel, ya que no están incluidos en el envase Baños oftálmicos Los baños oftálmicos humedecen y refrescan los ojos cuando se tiene sensación de sequedad y cansancio, ejemplo trabajo prolongado ante una pantalla de visualización, lectura, conducción prolongada etc. Entre otros existe en el mercado un baño ocular bajo la marca Bañoftal® El cansancio ocular puede detectarse por las molestias siguientes:
Los componentes vegetales (hamamelis y caléndula) se adaptan a la composición natural del líquido lagrimal y sus efectos descongestivos y revitalizantes permiten un mejor confort visual. Los baños oftálmicos constan normalmente de un frasco y una bañera que se llena con la solución la cuál se vierte en los ojos estado indicada dos a tres veces al día dependiendo de la fatiga visual. Soluciones oftálmicas Están indicadas sobre todo en urgencias oculares, cuerpos extraños tipo polvo, polen, sustancias contaminantes irritantes como ácidos y lejias. Sus efectos son inmediatos por contrarrestar el pH nocivo con valores fisiológicos. En este tipo de urgencias es imperativo el lavado e irrigación con este tipo de soluciones (por ejemplo Eye Stream®). En caso de lesión por causticación , tras un profuso lavado se aconseja acudir rápidamente al oftalmólogo. Recetas caseras Algunas personas afectadas por problemas oculares tienden a elaborar los colirios o baños oftálmicos para el tratamiento de ojos enfermos o para el cansancio ocular mediante recetas caseras. Por ejemplo, los extractos de tomillo o manzanilla poseen excelentes propiedades para el tratamiento ocular. Para ello se deben poner los extractos de las plantas en agua caliente o hirviendo y después dejar enfriar. Las investigaciones actuales indican que los extractos de manzanilla tienen efectos secantes. La manzanilla contiene sobre todo polen de flores, con lo cual se obtiene una acción alergénica. En la actualidad se considera que el efecto que produce en el ojo es médicamente contraproducente, y debe evitarse en casos de conjuntivitis o mucosas irritadas. Otra indicación para baños caseros es el agua de sal y jugo de limón. A menudo las cantidades no son exactas "aplicar una pizca de sal y un chorro de jugo de limón en agua hirviendo y dejar enfriar". Puesto que nadie sabe la dosificación exacta, las medidas se aplican según criterio propio. Resulta difícil poder determinar las consecuencias que podría provocar en los ojos una sobredosis de jugo de limón. La no esterilización reviste un riesgo considerable , una vez se ha enfriado la solución , ésta pierde sus propiedades de esterilidad y se convierte en un medio ideal para los microbios y amebas. Las consecuencias pueden ser graves infecciones, por este motivo se desaconseja la utilización de estas terapias como tratamientos oculares. |